Seguimos con la intención de analizar las distintas variables del negocio porcino en los últimos 10 años y su interrelación que, expresada en números, genera sorpresas y cambian ideas preconcebidas con el único objetivo de poder reflejar o pronosticar a futuro, lo que sucedió en los últimos años.
Introducción
Históricamente el Sector Porcino para su análisis, se ha dividido entre lo que sucede el primer semestre y el segundo semestre y el objetivo del presente trabajo es analizar 5 variables que son:
1. Cantidad de animales faenados
2. Precio del cerdo vivo*
3. Precio de la relación 5+2*
4. Margen bruto*
5. Precio promedio al consumidor (ICC)*
* valores expresados en dólares
Cantidad de animales faenados
Tomaremos como base la información oficial de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario (DNCCA) perteneciente a la actual Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca (Ex MAGyP). Recordamos que la información es de la faena informada y que en las estimaciones que hacemos desde hace algunos años el valor real de las cabezas faenadas varía entre un 17% y un 22% más que no se registra.
Precio del cerdo vivo
Al tener una caída constante del peso argentino con respecto al dólar nos pareció correcto dolarizar todas las variables que utilizaremos en este trabajo. A continuación, vemos lo sucedido durante los 10 años con el precio del cerdo en pie promedio máximo.
Precio de la relación 5+2
Esta relación que empezó a utilizarse hace más de 20 años promocionada por la Asociación Argentina Productores de Porcinos y desarrollada por el Agr. Raúl Lasorella, trata de expresar un precio orientativo del cerdo en pie, pero en este caso la tomaremos para mostrar la evolución de los costos de producción en dos de sus principales componentes, el valor de 5 kilos de maíz sumados a 2 kilos de poroto de soja.
Al igual que en el caso anterior, dolarizamos los valores.
Podemos observar en el gráfico siguiente las variaciones a través de los años con una tendencia hasta el 2020 descendente, que empieza a subir el año pasado y que continua actualmente. En este caso los valores tienen una incidencia internacional que fija precios y es independiente de la situación puntual local. El promedio total da un valor más alto para el primer semestre ($1.42/$1.37).
Margen Bruto
Como lo hacemos habitualmente, analizamos el margen bruto del negocio y no la rentabilidad. Podemos observar las variaciones entre años muy buenos a otros más limitados. La tendencia es que hay mayores valores de margen bruto en los segundos semestres que en los primeros.
Índice de Carne de Cerdo (ICC)
Analizaremos lo que sucedió con los valores que paga el consumidor en carnicería o góndolas, expresados en el valor promedio de los cortes mediante el Índice de Carne de Cerdo. Los valores fueron disminuyendo a través de los años hasta el 2020, viendo un aumento durante el año 2021. Los valores que pagó el público durante el primer semestre fueron superiores a los del segundo ($4.69/$4.51)
Relaciones entre todas las variables
En el siguiente cuadro mostramos los promedios de 10 años de las 5 variables analizadas.
En la comparación hay dos variables, la producción y el margen bruto que mostraron valores superiores en el segundo semestre con respecto al segundo. Las otras tres, el precio del cerdo vivo, el Índice 5+2 y el Índice de Carne de Cerdo fueron superiores en el primer semestre con respecto al primero (por eso el valor negativo).
El tema de producción, en un sistema donde se está creciendo de forma constante, es lógico encontrar diferencias con valores similares promedio a lo que se creció de un año a otro 6.5%.
En el tema del precio del cerdo en pie, haciendo la salvedad comentada en su momento que la mayoría de las devaluaciones son en el segundo semestre, muestra que el segundo semestre es -1.9% inferior a la cotización del primer semestre.
El Índice 5+2, que tiene una incidencia internacional, se observa que la diferencia del segundo semestre es inferior en un -4.0% al primero.
El margen bruto es de los positivos con un 6.0% y tiene su justificación en la diferencia de las últimas dos variables, ya que el precio del cerdo en pie tuvo una disminución menor que la del Índice 5+2. Los costos bajaron más que el precio de venta del cerdo. Por último, el Índice de Carne de Cerdo tuvo un comportamiento negativo del -4.0% en el segundo semestre, comparado con el primero. Esto muestra un desacople con el precio del cerdo en pie y es parte de los problemas que a veces no tienen lógica.
Conclusión
La oferta de cerdos desde la producción siempre aumentó y lo seguirá haciendo en los próximos años, relacionado con una demanda creciente del consumo de la carne fresca. Al haber más oferta los precios tienden a disminuir y en este punto uno hubiera esperado que los precios del cerdo en pie en el segundo semestre fueran superiores a los del primero y no sucedió en el análisis 2012-2021. Pero también disminuyeron los precios del maíz y la soja (5+2) en el segundo semestre y de forma más acentuada, provocando que el margen bruto fuera mayor en el segundo semestre y esto provoque que los productores estén con mejor ánimo en el segundo semestre que en el primero.
La situación de los precios al público (ICC) es la más complicada de encontrarle un razonamiento ya que en un sistema normal deberían seguir la tendencia del cerdo en pie. Acá se produce un desacople que tiene que ver con los distintos eslabones de la cadena. Mismo en el momento que la industria de chacinado más requiere mercadería en el segundo semestre, los precios al público bajan. Quizás la razón pueda estar en la gran participación que tiene en el consumo la carne fresca y la poca que tiene cuando se transforma en chacinados.
Este trabajo es solo un disparador más que incita a todo el sector a entender las variables que se suceden y que no esperamos o que contradicen la lógica que tenemos arraigada.